Todos hacemos estadística en un centro educativo….

Con ocasión de la I Jornada de responsables de formación, innovación, y evaluación en los centros educativos organizadas por @cepmalaga el 29 mayo 2014, tuve la suerte de presentar la  comunicación abajo enlazada …

Desde el momento en que trabajamos en un centro educativo todos hacemos estadística. Lo hacemos cuando nos dirigimos a una clase y hacemos pronósticos sobre el rendimiento educativo del alumnado; pensamos que tenemos un grupo en la media, por debajo o por encima. Calculamos mentalmente los problemas de convivencia que tendrán o han tenido, si tenemos que adaptar al grupo la programación, la manera de evaluar, etc. . La característica general de toda esta estadística es que es personal e intutitiva. Y está bien que así sea.

Pero no sólo aplicamos esta estadística personal dentro del aula, también fuera de ella. Todos establecemos intuitivamente indicadores de lo que ocurre en un centro. Tenemos una idea sobre si estamos en un centro con rendimiento académico alto, medio o por debajo de lo habitual. Y no sólo lo hacemos con el rendimiento académico, también lo hacemos con la convivencia, Tenemos la sensación de que la organización del centro mejora, empeora o se mantiene tediosamente igual. Todo esto lo hacemos sin contar un solo alumno sólo fiándonos de nuestra experiencia, de las conversaciones de pasillo, del bar, de nuestra intuición …  Y no digo que no sea útil este tipo de análisis … Si llevamos cierto tiempo ejerciendo esta profesión es posible que acertemos muchas veces. Sin embargo, no está mal contrastar nuestro sentido común y nuestra intuición, de vez en cuando, con los datos. Nuestra experiencia tiene límites: no podemos saber lo que ocurre en todas las aulas, en todos los grupos, con la totalidad del resto de los compañeros. Tenemos un conocimiento anecdótico de lo que que pasa en otros centros educativos de la zona. Todo este conocimiento y sentido común está sometido al azar de nuestras relaciones personales, localizado al ámbito donde nos movemos, etc.

Si nos detenemos a comparar estas ideas acerca del sistema educativo en su versión ‘micro’ (mi centro, mi aula, etc) con su versión ‘macro’ (comparación ponderada con otros centros, etc) es fácil acordar que sería deseable, aunque sea por curiosidad, contrastar los datos.
Ahora bien, ‘fácil’ es la palabra clave. ¿Es fácil tener una idea menos intuitiva y más precisa de todos estos temas?

Los Departamentos de Formación, Evaluación, e Innovación educativa en los centros educativos prentenden, entre otros objetivos, concretar esa idea general mediante indicadores, estadísticas, etc. Mi idea es que es bastante difícil si no recurrimos a ciertos instrumentos de visualización de la información. Un ejemplo: sólo consultando la AGAEVE este departamento tiene más de 300 páginas de instrucciones, guías, etc para estudiar… ; echa un vistazo a esta presentación si no te lo crees …